Mercados. Resurge la ganadería. Crecen las subastas de cabañas.
02/09/2017
Guillermo Ibarra
Las buenas perspectivas que se evidencian para la ganadería argentina, a partir de políticas que fomentan la exportación y la búsqueda de nuevos mercados para los cortes vacunos de estas pampas, comienzan a repercutir sobre el primer eslabón de la cadena del negocio pecuario: la comercialización de reproductores. En efecto, el actual ciclo de remates de cabañas demuestra el resurgir ganadero y lo expresa en un mayor número de subastas y en valores muy superiores a los vigentes en 2016. Así, la decisión de invertir en la incorporación de líneas de sangre que optimicen la producción de carne -el fin primordial de todo lo que ocurre en esta etapa del año- vuelve a dinamizar un sector que apunta a un crecimiento sustentable.
«Una de las características que estamos viendo en lo que va del ciclo de remates de cabaña es que no están quedando animales sin ser vendidos en las subastas. La demanda está muy firme y todo lo que se expone se coloca. Nosotros este año estamos aumentando la oferta de animales entre un 10 y un 15% respecto de 2016, con más de 130 remates auspiciados y con la participación en unas 55 exposiciones, y pese a ese importante volumen de oferta, la demanda está absorbiendo todo lo que se presenta», destacó a LA NACION Javier Martínez del Valle, director ejecutivo de la Asociación Argentina de Angus.
En el mismo sentido, Horacio Luis La Valle, prosecretario de la Asociación Argentina de Criadores de Hereford, señaló que los remates desarrollados desde junio y hasta la actualidad «muestran resultados auspiciosos para el resto de la temporada, dado que se percibe un marcado interés de los compradores por incorporar toros y hembras que puedan aportar un mejoramiento genético a sus rodeos». Y añadió que los valores de los reproductores hoy «superan a los del año anterior en entre un 20 y un 40%».
Desde la Asociación Braford Argentina, su director ejecutivo, Gustavo Cócaro, explicó que los remates de la raza auspiciados por la entidad evidencian «excelentes precios y una gran avidez por parte de los productores por la adquisición de reproductores Braford registrados por la asociación. Hoy, que estamos en la mitad del ciclo de subastas, podemos estimar que los promedios obtenidos por los machos han crecido entre un 50 y un 60% respecto de 2016».
Para Facundo Rivolta, gerente de la Asociación Argentina de Brangus, el ciclo de ventas de cabañas está siendo «altamente positivo e incluso los resultados están muy por encima de las expectativas, tanto en precios como en volúmenes comercializados». Agregó que en los remates las ventas se dan con mucha fluidez por la firmeza de la demanda. «Respecto del año pasado crecimos un 10% en volumen comercializado y un 39% promedio en los valores alcanzados por los machos, con una transición de 55.000 a 76.500 pesos».
En las cuatro asociaciones de criadores destacan los crecientes pedidos de auspicios recibidos desde las cabañas. «El pedido de auspicio de remates es cada vez mayor. Esto marca una tendencia creciente en la compra de genética garantizada y, por consiguiente, una mejora en el mediano plazo de los rodeos en los que será utilizada. Por otra parte, el ganadero confía en que las políticas para el sector van a mejorar la situación y por eso se decide a invertir, sabiendo que el retorno tomará un tiempo de tres a cuatro años», explicó Cócaro.
Martínez del Valle destacó que la demanda hoy se está orientando hacia animales registrados, «cuando en otras épocas, cuando las expectativas no eran las mejores, se tendía a incorporar reproductores generales, sin todos los controles ni las garantías que pueden brindar las asociaciones de criadores. Frente a expectativas favorables, los productores están trabajando en armar rodeos de buena genética, probada y garantizada por la asociación».
Ocurre que el actual resurgir ganadero demanda la reconstrucción de planteles, algo que no se consigue de un día para el otro. «En los últimos dos años muchos productores que habían abandonado la ganadería están tratando de regresar a la actividad, particularmente en las zonas menos productivas de sus campos, y ello ha generado una demanda de toros de calidad, ya que muchos son rodeos chicos y se pretende que tengan alta calidad, tanto para engordes posteriores como para la venta de terneros. Cada vez más los productores diferencian por calidad, utilizando incluso información objetiva de los Dep’s (Diferencias Esperadas entre Progenies) para agregar valor a su productividad», dijo Rivolta.
El representante de Hereford señaló: «Sin duda hoy notamos que entre los compradores de la raza crece el interés por toda la información objetiva que proporciona el Programa de Evaluación Genética Hereford. Las Dep’s son una valiosa herramienta para predecir los resultados que pueden obtenerse usando distintos reproductores en materia de pesos al nacer, al destete y a los 18 meses; leche materna; circunferencia escrotal; área de ojo de bife, y espesor de grasa, entre otros indicadores».
Cócaro sumó otro dato que hoy resulta relevante para los compradores: la confiabilidad del vendedor. «Esto tiene que ver con la capacidad de respuesta en la ?posventa’ ante algún problema que pueda surgir y es ahí donde la veracidad de los datos productivos cobran valor y donde se potencian los auspicios de las asociaciones, que certifican los datos presentados por el proveedor de genética».
Facilidades para invertir
A tono con la firmeza del circuito de remates se está dando una particular competencia entre entidades bancarias para ganar clientes con sus sistemas de financiación. «Los financiamientos hoy son muy importantes y estimulan la compra de reproductores. Esto habla de las buenas perspectivas para el sector, que también son visualizadas por las entidades bancarias», dijo Cócaro. En el mismo sentido, La Valle añadió que las financiaciones a tasas muy bajas o incluso sin costo ofrecidas con las tarjetas bancarias «son un atractivo importante, particularmente para el incremento de la compra de vientres».
La otra práctica que comienza a generalizarse en las subastas de animales de elite es la venta a porcentaje, que implica una asociación estratégica entre el vendedor y el comprador. «Esta es una práctica que llegó para quedarse, sobre todo a partir de las técnicas de trasplante embrionario in vitro. Es un modo de compartir la genética, obviamente de facturar, y de mantener parte del desarrollo genético logrado», destacó Fernando Foster, gerente Comercial de Bellamar Estancias SA, firma que hasta el momento logró el mejor valor del actual ciclo de remates, con $ 1.350.000 por el 50% de la Reservada de Gran Campeón Ternera de la última exposición nacional de la raza Brangus en Chaco (como se amplía por separado).
Promedios altos y máximos históricos en el ciclo de remates
Según los precios promedio relevados por las asociaciones de criadores de las cuatro principales razas, respecto de 2016 las subas van del 20 y hasta el 60%.
1,35 M
Brangus récord
En el actual ciclo de ventas, el precio máximo es $ 1.350.000 y lo pagó la Cabaña Don Julio, de El Impenetrable SA, de Tucumán, por el 50% de la ternera Brangus «María», de Corral de Guardia, de Bellamar Estancias SA, en el remate concretado en Las Varillas, Córdoba.
1,10 M
La elección Angus
Durante la subasta en el Restaurante de la Sociedad Rural en Palermo, la Cabaña Tres Marías, de Horacio F. Gutiérrez, logró el precio máximo de la raza Angus, tras vender el 50% de una elección (cría macho negro) en 1.100.000 pesos al Grupo Casabranca, de Brasil.
980.000
Tope en Braford
Para la raza Braford, el tope hasta el momento es de $ 980.000 y se alcanzó por el toro «Boomerang», vendido por la Cabaña Pilagá, de Capil SA, a la sociedad formada por el Centro de Inseminación Artificial La Elisa (Ciale) y por la firma Salentein Argentina.
410.000
Polled Hereford
Durante la Noche Hereford, en la Exposición Rural de Palermo, se alcanzó el precio máximo de la raza hasta el momento, de 410.000 pesos por un toro Polled Hereford de Antiguas Estancias Don Roberto SA, adquirido por Cía. de Tierras del Sud Argentino SA.