Mañana, a votar en paz.

En este último tiempo hemos asistido a confrontaciones de todo tipo. Hemos sido testigos de discusiones, peleas, insultos, difamaciones; todo parecería válido a la hora de sumar un voto o restarselo al otro.

La democracia es el mejor camino para tratar de lograr el bien común de todos. Y nosotros tenemos la herramienta fundamental para intentarlo; el voto. No hay mayor ejemplo de igualdad entre las personas que una elección. Vale lo mismo mi voto que el tuyo, el de un rico que el de un pobre, el de una persona instruida que el de la persona que no lo está.

Siempre decimos que el día de las elecciones es un día de fiesta. A pesar de que muchos colaboran demasiado para que no lo sea, debería serlo. Se viven oportunidades únicas. Hagamos el esfuerzo por favor y sobre todo en Navarro.

Después de mañana, no sólo vamos a tener que seguir trabajando igual como por ahí dicen, sino que nos vamos a cruzar nuevamente en cada rincón de nuestra ciudad. Por eso, utilicemos las  oportunidades que se nos presentan, pero fundamentalmente hagámoslo en paz. Intentemos que no haya cruces entre fiscales, que no se roben boletas, que en las mesas se trabaje en forma armónica. Así debe ser. El resultado, seguramente será generado por las distintas actitudes, las distintas propuestas, los hechos ocurridos en este último tiempo, y sea cual sea ese resultado, estemos de acuerdo o no, debemos aceptarlo.

Se dijeron demasiadas cosas sobre el desarrollo de estas elecciones, pero los navarreros debemos demostrar grandeza y estar a la altura de las circunstancias. Mañana, a votar en paz. Y a partir de mañana, a darnos cuenta de que unidos, seguramente podremos desarrollarnos de otro modo. Cuando nos demos cuenta de eso, Navarro será indudablemente el que todos queremos.

Guillermo Ibarra